Algunos clientes nos preguntan sobre el tiempo y el tipo de visita que se realiza en el inmueble sobre el que han contratado una tasación oficial. En nuestro blog, ya hemos hablado de como es la visita a una propiedad anteriormente, y ahora, vamos a hablar de las comprobaciones que debe realizar un tasador sobre la propiedad que está tasando.
Identificación física de la propiedad
En primer lugar, es imprescindible realizar una visita a la propiedad, para realizar la pertinente identificación física de la misma. Con esto, el tasador consigue localizar la propiedad además de realizar una inspección ocular.
Mediante la identificación física, el tasador comprueba la superficie construida del bien objeto de tasación, además de las características, acabados y calidades que presenta dicha propiedad.
La visita puede ser un elemento fundamental a la hora de dar una valoración u otra, ya que, podemos encontrarnos una vivienda en un muy buen estado o una vivienda casi en ruina, lo que afectará al estudio de mercado de dicha propiedad.
Estado de ocupación y uso
Otro factor a tener en cuenta cuando se realiza una tasación oficial de una propiedad es el uso que tiene una propiedad o el estado de ocupación ya que, puede afectar de forma directa al valor de tasación. Por ejemplo, en el caso de un piso que se utiliza como oficina, quizá no pueda ser tasado como vivienda.
En este caso, el estado de ocupación, libre u ocupado (ya sea por usufructo, por alquiler o por ocupas) puede ser determinan en la minusvalía del valor de tasación o la plusvalía del mismo valor. El valor optimo siempre es el de libre mercado pero, en algunos casos, un alquiler con un contrato largo puede determinar un incremento del valor según el método empleado en la tasación.
Normativa urbanística y adecuación al Plan General de Ordenación Urbana
En el caso de algunos inmuebles, la última comprobación es la consulta del PGOU, para determinar la legalidad, o no, del inmueble construido. Es habitual encontrarse con excesos de cabida o con edificabilidades no agotadas, por ello, en algunas ocasiones el valor que se estima de una propiedad puede ser muy diferente a su valor real.
Esta comprobación es habitual en viviendas unifamiliares, solares, naves industriales o fincas rústicas, pero, en alguna ocasión nos hemos encontrado con un edificio de varios pisos, que estaba fuera de ordenación urbana.
Realizar una tasación oficial, no es solo dar una valoración a una propiedad, es, también, certificar el cumplimiento de la normativa vigente y realizar las comprobaciones necesarias para la valoración de dicha propiedad. Esta serie de comprobaciones, puede hacer que, en determinadas ocasiones, las valoraciones queden advertidas o condicionadas, hecho que limitaría el valor y la validez del informe.
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